Aulas, marzo 1999

 

La Facultad de Ciencias se pronuncia en contra de su posible división

 

Llamaquique, Entaína

 En sesión ordinaria, el viernes 5 de marzo de 1999, la Junta de la Facultad de Ciencias se decantó por no apoyar el proceso de división que ha planteado el rectorado por iniciativa de varios profesores del Departamento de Física. Dicho proceso consiste en dividir, de forma puramente administrativa, la Facultad de Ciencias en dos: una que se llamaría Facultad de Física, y otra, Facultad de Matemáticas.

La Junta de Facultad fue convocada para que se pronunciase al respecto, debido a la urgencia del Rector en llevar a cabo esta división ya que, según sus propias palabras en Junta de Gobierno de la Universidad (celebrada a finales de febrero) si hay una facultad de Química, una de Biología, etc., tiene que haber una de Física y de Matemáticas. Por lo visto, la sugerencia que se le hizo de un simple cambio de nombre no le servía, y por alguna razón debían ser dos facultades. En la misma Junta de Gobierno se trataba el tema de la división del Departamento de Física (aunque éste fue pospuesto de forma indefinida sin ninguna razón aparente), lo cual hace inevitable pensar que se pretende vincular la división de la Facultad con la del Departamento, con vistas a que en la futura Facultad de Física los votos estén repartidos como en el actual Departamento, o de forma aún más sesgada, dado el proceso de cambio de Plan de Estudios que se acaba de iniciar (y el consiguiente reparto de asignaturas).

La petición fue elevada al rectorado a través de un escrito de unas 15 firmas en el que, sin exponer su motivación, varios profesores de Física y Matemáticas mostraban su apoyo a tal división. El escrito fue presentado en la Junta de Facultad por el profesor del Departamento de Física, J.M. Virgós Rovira, ex-vicerrector de Ordenación Académica y Profesorado, sin que previamente el decanato, y muchos profesores del citado departamento y de otros de Matemáticas tuvieran noticia de él.

En principio, la argumentación del Sr. Virgós no fue más allá de una crítica a un comunicado que el colectivo de alumnos Entaína había pegado por la Facultad manifestándose en contra de tal división, aunque posteriormente tuvo que responder a preguntas sobre las causas concretas que habían motivado dicha petición. Siguiendo el razonamiento de un profesor de matemáticas, el Sr. Virgós reconoció finalmente que no existían razones de tipo administrativo (la Facultad aglutina entorno a los 700 alumnos frente a facultades como la de Derecho que triplica el número de alumnos), ni tampoco había razones de tipo científico en cuanto a incompatibilidad investigadora entre físicos y matemáticos, y por tanto, sólo podía haber razones de tipo político, sobre las cuales se centró el debate.

Finalmente los miembros de la Junta de Facultad tuvieron que distinguir si la división de la Facultad tenía una motivación política legítima o si, por el contrario, sólo perseguía acumular el poder en unas manos bien determinadas y controlar las decisiones pertenecientes al ámbito de la Facultad como son, por ejemplo, las referentes al Plan Docente (que en Física fue denegado) y al Plan de Estudios, recientemente sometido a debate. A pesar del claro pronunciamiento de la Facultad (60 votos en contra de la división frente a 13 y 1 en blanco), aún cabe la posibilidad de que sea dividida si el rectorado desoye tal pronunciamiento, como ocurrió en el caso del mencionado Plan Docente de Física.